Es un trastorno afectivo más frecuente de lo que pensamos. Consiste en una forma de expresión de dolor, es decir, es un trastorno del estado del ánimo.
Puede tener múltiples causas y suele clasificarse como episodio depresivo leve, moderado y grave.
En todo tratamiento de depresión se valora el entorno del paciente, ya que le influye en gran medida.